LA ESCUELA FUERA DE LA ESCUELA

PARADOJAS Y REFLEXIONES:

·         La escuela es una institución pretendidamente igualadora que mantiene mecanismos que favorecen el elitismo.

En esta oportunidad podemos entender esta paradoja de la búsqueda en la institución de la igualdad pero que a su vez,  esta institución contiene un mecanismo que favorece el elitismo, es decir, una educación en donde  difícilmente el total de los alumnos  podrán adquirir de igual medida las habilidades y competencias necesarias para desempeñarse, generalmente no se toma en cuenta la diferencia de  igualdad con la equidad y me parece sumamente importante tener en cuenta esta diferencia. Para ello las instituciones deben ingresar en la parte de configuración del sistema, luego  en la parte del mecanismo y cambiar estos engranajes de manera  de lograr mediante una evaluación que las habilidades y competencias tengan la misma llegada y aplicación a todos. Y que todos tengan el mismo derecho a la educación de forma igualitaria, no los que puedan solamente. Porque lo importante no es bajar,  sino aumentar el nivel.

En nuestro país no ha habido políticas igualitarias suficientemente consistentes para producir resultados apreciables.

Y esto se hizo mucho más evidente este año, en el caso de las clases no presenciales, hubo una desigualdad notable, en el sentido de la brecha gigante entre los alumnos que disponían de recursos para llevar adelante la educación y de los que no tuvieron esa posibilidad. Entonces no podemos hablar de una educación igualitaria, sino de una educación elitista.

 

 

·         La escuela es una institución aparentemente neutral que esconde una profunda disputa ideológica.

En esto de la institución de ninguna manera será neutral debido a que son conducidas por personas y estas actúan subjetivamente, es decir, que mientras la institución sea dirigida por el ser humano, la ideología de la persona estará siempre presente, aunque la apariencia diga lo contrario y para agregar sabemos que la subjetividad carece de neutralidad y por ello podemos encontrar esta disputa ideológica que por lo general se mantiene entre  las jerarquías que ocupan las instituciones.

·         La escuela es una institución homogenizadora que pretende atender la diversidad:

La cultura de la diversidad no se ha impuesto en la escuela. Pero es precisamente la diversidad, entendida y practicada de forma enriqueedora lo que constituye la esencia de la educación.

“La política de la diferencia debe constituir una práctica emancipadora” (Giroux, 1992).

La sociedad actual ha vivido en estos últimos años una acumulación de cambios en los valores, actitudes y prácticas, que se reflejan en los planteamientos de la educación y en la realidad de la escuela. Uno de estos cambios se refiere al reconocimiento de la diversidad del alumnado, que obliga a la búsqueda de alternativas didácticas en la educación y en la práctica de la escuela: desde el reconocimiento explícito del derecho de todos a la educación y de que ésta se desarrolle atendiendo a la igualdad de oportunidades; donde la diversidad sea un valor enriquecedor y positivo para todos. Estas alternativas se fundamentan en el paso de un modelo de intervención compensatoria a introducir prácticas coherentes con la inclusión educativa, que se fundamenta en la implantación de un currículum comprensivo común y a la determinación de apoyos normalizados para alcanzar una real integración de todos los alumnos.

La diversidad se fundamenta en cuatro razones (Muñoz, Rué y Gómez, 1993; 52):

• Sociales: al considerar la educación como un medio de compensación de las desigualdades sociales.

• Culturales: al concebir la realidad humana como plural, abierta y relativa.

•Éticas: al considerar la profesión educativa como una actividad promocionadora y no sancionadora ni selectiva.

• Psicopedagógicas: al considerar el aprendizaje como un proceso social de reconstrucción del pensamiento personal.